Este amuleto se usaba muchísimo en los templos cristianos, llevando consigo las letras Alfa y Omega, es decir las letras forman la inicial y la terminal del alfabeto griego que a su vez significa principio y final. Alfa se relaciona con el compás, simbología del Dios creador y la letra Omega se asemeja a una lampara, el fuego de la destrucción apocalíptica.
La puerta de la vida, indica la separación entre dos reinos el mortal y espiritual, representando a si el principio y el fin de la vida en nuestro planeta, esto significa el ciclo de la vida que nunca deja de correr.
Este amuleto nos pone en comunicación con la vida eterna, nada perdura en lo material y todo transcenderá a la inmortalidad, la puerta es la conexión de un lado a otro, esto son indicios de que la muerte no existe simplemente es un estado mas del alma, nada se pierde no se destruye, solo se transforma en otra cosa.
Son muchas las propiedades que se le atribuyen a este amuleto, se usa mucho para quitar el miedo a los cambios protegiendo la inmortalidad del alma. Sirve para la apertura mental y espiritual, también es muy bueno para alejar a los malos espíritus o las malas energías.